Las recientes medidas de subidas de impuestos y recortes masivos de servicios públicos van encaminadas a mitigar el déficit, que en gran medida se está agrandando por los elevados costes de la deuda pública, es decir, el coste de la financiación del país.
El Gobierno ha argumentado que buena parte del elevado coste de la deuda se debe a la necesidad de recapitalizar a los bancos, sin embargo, que sepamos, hoy por hoy (01/09/2012), la proporción que ha llegado a las entidades financieras con respecto a lo que se espera, es mínima.
Esto nos puede dejar clara una cosa: la reforma financiera tendrá un coste elevado, pero el déficit de hoy se debe a otros factores, que en cualquier caso tienen que ver con las Administraciones Públicas, ya sean centrales, regionales y locales: gastan más de lo que ingresan.
Vayámonos al apartado de la reforma financiera, y entendamos por un momento qué va a ocurrir con nuestro dinero, y digo nuestro, porque al fin y al cabo el Estado va a pagar el coste del rescate gracias a las subidas de impuestos y recortes que estamos sufriendo.
¿Por qué los bancos necesitan tanto dinero? ¿Se puede pasar en cuestión de un año de tener el sistema financiero más fuerte de Europa al más débil?
Centrémonos en el caso de los bancos y observemos cómo se trata de un
tema puramente contable. Veamos un sencillísimo e inocente simil:
Supongamos
que para acceder a un Cuerpo de Seguridad del Estado "X", nos imponen
como requisito primordial contar con una estatura mínima de 170 cm, y
supongamos que nos aceptan porque medimos exactamente 171 cm.
Pasado
un tiempo, nos envían una carta y nos dicen que han subido la estatura
de admisión, que ahora hay que medir 175 cm, y que todo el que no llegue
a esa altura, debe abandonar el Cuerpo.
¿Somos mejores
o peores agentes de seguridad por medir 4 cm menos del nuevo requisito?
Somos la misma persona, pero las exigencias ahora son mayores.
Con
los bancos ha pasado algo parecido: se les exigía un determinado ratio
de solvencia de capital, las famosas reservas o provisiones, es decir,
tener un determinado número de euros por cada 100 euros que se han
prestado a clientes con altas probabilidades de no pagar, todo esto
modulado por el valor de la garantía del propio préstamo, por lo que, en
la medida de que la garantía (normalmente hipotecaria sobre activos inmobiliarios) haya perdido
valor, más euros habrá que provisionar por dicho préstamo de dudoso
cobro.
Para que todos lo entendamos, lo curioso es que
este dinero que se pone en reservas hoy, el banco lo contabiliza como
una pérdida. Sin embargo, mañana, a medida que el préstamo se va pagando
o se consigue pagar en su totalidad, estas pérdidas se convierten en
beneficios, pues salen de la cuenta contable de las reservas o
provisiones, con destino directo a la de las ganancias. El banco ni pierde ni
ingresa nada, sólo cambia el dinero de una cuenta contable a otra. Para que quede más claro, no estamos hablando de pérdidas referidas a que los costes sean mayores a los ingresos.
Por tanto, los bancos sólo están "guardando" hoy en un
cajón los beneficios de mañana, que irán aflorando a medida de que vayan
cobrando estos créditos de dudoso cobro, o se vendan las propiedades o se vendan
los propios préstamos. No nos engañemos, repito, las pérdidas de hoy de los bancos, no
son pérdidas reales, están guardadas en el "cajón" de las provisiones,
no hay un desembolso de esas cantidades de dinero, las tienen ellos
mismos en una reserva contable.
De este modo, que nadie
se eche manos a la cabeza con noticias como la del día 31/08/2012 donde
nos dicen que Bankia (el gran banco nacionalizado) tiene en el primer semestre de 2012 pérdidas por
casi 4.500 millones de euros, todo ese dinero no está fuera de las
propias cuentas de Bankia, sigue ahí, y que nadie se extrañe cuando en
2.013 veamos la cifra astronómica de los beneficios de esta entidad,
probablemente rozarán los 1.500 - 1.700 millones de euros anuales.
Además de esto, el próximo Banco Malo que creará el Gobierno, se encargará de comprar a las entidades esos activos problemáticos, por lo que convertirán en dinero líquido dichos inmuebles, y el "marrón" se lo pasarán al "Banco Malo", es decir, al Estado. Lo importante en este caso es que el "Banco Malo" compre estos activos a un precio muy inferior al de mercado, de manera que pueda venderlo con beneficios a terceros interesados, y así acaben sirviendo para reducir el déficit del país.
Permanezcamos vigilantes, pues será muy importante cómo se gestiona el Banco Malo. Si se hace mal, se habrá regalado dinero a los bancos, si se hace bien, el Estado podría contar con una interesante fuente de ingresos a largo plazo.
Saludos desde Vancouver, Mr. Fahrenheit.
ResponderEliminarYo ya sabía que Bankia no estaba en problemas reales de solvencia porque vi una aclaración muy gráfica y sencilla de lo que estaba sucediendo en el tiempo en que Rodrigo Rato dejó la entidad. Lo que no sabía era que las provisiones se cuentan como pérdidas, ahora, y como ganancias, después. Si para el año que viene éste y otros bancos, pasan a tener ganancias importantes, será bueno porque creará confianza. O eso supongo yo.
Pero de cualquier manera, no entiendo porqué no se explica esto, como tu lo has hecho, en las ruedas de prensa del gobierno o tribunas parecidas. Estoy cansado de oír en la calle que Bankia está en quiebra y cosas del estilo porque la mayoría de la gente ni sabe ni entiende lo que sucede porque nadie se lo explica. Y esto solo lleva a que la gente tema por su dinero y se cree más desconfianza, porque no saben si es que lo pueden perder o qué pasará. ¿Todavía no saben los políticos que lo hace falta es confianza para que el dinero se mueva, no para que se pare más?
Saludos.
Hola Ber, un abrazo desde España y muchos ánimos en tu aventura canadiense. Hay que tener mucho valor para dar el paso que has dado.
EliminarEstas cosas no se explican por varios motivos: 1. Los políticos, en general, no tienen ni idea de este tipo de cosas. 2. Si te cuentan esto así, y te das cuenta que el dinero que se inyecta en los bancos hoy son los beneficios de mañana... puede que se arme la de San Quintín, y los políticos no quieren más problemas. 3. Los llamados periodistas especializados, en general, no tienen ni idea de economía, pero igual que yo no tengo ni idea de periodismo ni de ciencias de la salud, no les critico, pero en general no tienen la formación adecuada para investigar estos temas y sacarles jugo.
Aclarado el funcionamiento, pero no todo es tan sencillo. Los políticos sí han dicho que el dinero que se ha dado a los bancos en realidad no es a fondo perdido, sino un rescate.
ResponderEliminarEste dinero lo aparcan bajo "provisiones" para cumplir el ratio exigido, compensando los préstamos que tienen en cartera. Dices que cuando esos préstamos se cobren, la parte de provisiones quedará liberada y contará como ganancia. Pero no citas dos cosas:
1) Habrá préstamos que no se paguen. Eso es bastante claro (las viviendas que garantizaban los préstamos no alcanzan para cubrir la cantidad.
2) El dinero del "rescate" habrá que devolverlo, con intereses. Yo (y sospecho que más gente) no me lo creo mucho, ya inventarán algo. Más que nada, porque si los bancos se empeñan en que no tienen para pagar, pero tampoco se les puede dejar quebrar...
Y sobre el banco malo, dices que se trata de que "compre estos activos a un precio muy inferior al de mercado, de manera que pueda venderlo con beneficios a terceros interesados, y así acaben sirviendo para reducir el déficit del país". Pero empiezas la frase hablando de "marrón". No te veo muy convencido.
Si el banco malo compra baratos los pisos, en cualquier caso, estamos materializando el supuesto 1) y, con ello, reforzando mi hipótesis con respecto al supuesto 2).
En teoría es un chollo, pero siempre que se permita que los bancos asuman las pérdidas y las consecuencias que ello tenga.
Gracias por tu comentario, "Tras la Persiana", que por cierto, recomiendo desde aquí su blog: http://traslapersiana.blogspot.com.es
EliminarNo todos los rescates van a ser por la vía del préstamo, las nacionalizaciones son vía entrada en el capital de los bancos, por lo tanto, el Estado se convierte en accionista mayoritario de la entidad nacionalizada.
Cuando el Estado entra en el capital, esto no es un préstamo, por lo que no se devolverá el dinero según plan de amortización, ni se pagarán intereses, sino que el Estado venderá en un momento dado las acciones a precio de mercado, supuestamente, tratando de obtener plusvalías en la venta.
Sin embargo, he de comentarte que el tema de las provisiones no es exactamente así, es decir: el banco provisiona los préstamos morosos, pero cuando ejecuta las hipotecas y se adjudica el bien hipotecado, el valor del bien sustituye la provisión realizada, de tal forma que la provisión pasa directamente a la cuenta de resultados como un ingreso.
La siguiente fase del banco será vender los activos adjudicados, ya sea a un comprador interesado o a el banco malo. Por tanto, si el dinero para las provisiones las pone el Estado vía rescate, y en el caso de las entidades nacionalizadas, vía capital, el Banco ya ha ingresado la provisión "gratis", y cuando vende la propiedad, recibe además el precio del bien.
Sobre lo del Banco Malo, me refiero a "marrón", porque aunque el Banco Malo luego tenga margen de hacer negocio con las propiedades que adquiera, nadie desearía tener que montar un "Banco Malo", ya que aunque sea un negocio,, no se ingresará nada hasta que no se vendan, y aunque esté muy bajo el precio, es posible que cueste mucho tiempo vender algunos activos, ya que la oferta supera ampliamente a la demanda.
Un abrazo amigo, y espero seguir viéndote por aquí.
Como empleado de Bankia que soy, agradezco muchísimo leer por fin algo razonable al respecto. Solo Dios sabe por lo que estamos pasando. Habría que hurgar a ver qué intereses hay detrás de ésta campaña de acoso y derribo contra nuestra casa (llevo 32 años como empleado de Caja Madrid).
EliminarMuchas gracias.
Gracias por escribir, y me alegro mucho de que una persona del sector bancario lea este blog, siempre es bueno contrastar opiniones.
EliminarTengo bastantes amigos y conocidos dentro del sector, y sé que internamente, tanto en Bankia como en otras entidades, los empleados se están llevando la peor parte, puesto que se avecinan fuertes reestructuraciones de plantillas y recortes laborales.
A menudo se nos olvida que los culpables de la mayoría de las decisiones de estas entidades, que provocan situaciones como las que se viven hoy en día en la banca, se maduran en ámbitos políticos y de alta dirección, donde los empleados son meros peones en un tablero que ponen y manejan caprichosamente otras personas.
Sólo espero que, tanto empleados como los banqueros, tomen nota de lo que hoy está sucediendo, y todos, en su parcela, puedan poner su granito de arena para aprender de los errores y evitar, cada uno en su ámbito, situaciones como la actual.
Un saludo amigo, espero que vosotros podáis ejercer una banca más ética, aconsejando mejor a vuestros clientes y poniéndoos en el lugar de ellos, tratándolos como si de un hermano o padre se tratase. Ánimo.